El 15 de enero de 1939, en Ocotal, Nueva Segovia, nació Faustino Ruíz López, conocido en la historia revolucionaria como “El Cuje”, uno de los principales líderes de la lucha libertaria y fundador del Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN).
Hijo de Feliciano Ruíz López y Dominga López, creció entre el trabajo y su pasión por el béisbol, en las mismas montañas segovianas donde décadas antes había combatido el General de Hombres Libres, Augusto C. Sandino.

El Chaparral (1959)

En 1959, Faustino Ruíz integró el grupo guerrillero que el 29 de junio participó en la acción militar de El Chaparral, una incursión que fue atacada por la Guardia Nacional. En ella también participó el Comandante Carlos Fonseca Amador, quien resultó herido.
A partir de ese momento, “El Cuje” se consolidó como un cuadro clave dentro del naciente movimiento revolucionario, comprometido con la causa popular y la justicia social.

Fundación del FSLN (1961)

El 23 de julio de 1961, cuando la lucha alcanzó un mayor grado de madurez política e ideológica, Faustino Ruiz formó parte del grupo de hombres revolucionarios que fundaron el Frente Sandinista de Liberación Nacional.
Junto al Coronel Santos López, Carlos Fonseca Amador, Silvio Mayorga, Jorge Navarro, Francisco Buitrago, José Benito Escobar, Tomás Borge, Germán Pomares Ordóñez y Rigoberto Cruz “Pablo Úbeda”, dieron vida a la organización político-militar que encarnó la continuidad histórica del pensamiento sandinista.

Héroe de Raití-Bocay (1963)

Dos años después, el 23 de julio de 1963, el FSLN emprendió su primera experiencia guerrillera en las montañas de Raití-Bocay y Walaquistán.
Faustino Ruiz, junto a Modesto Duarte, estuvo al mando del grupo de avanzada de los combatientes, participando en las acciones que marcaron el inicio de la lucha armada sandinista.

El 27 de octubre de 1963, “El Cuje” entregó su vida en combate durante el desarrollo de esta gesta heroica, enfrentando a la Guardia Nacional somocista.
Junto a él cayeron Jorge Navarro, Modesto Duarte, Mauricio Córdoba, Iván Sánchez y Francisco Buitrago, dejando un legado de valor y sacrificio que iluminó el camino hacia la libertad de Nicaragua.

Legado de un hijo de la patria

“Hablar de Raití-Bocay es hablar de los mejores hijos de la Patria: destacados estudiantes, buenos hijos, que lo dejaron todo —padres, hijos, esposas, hermanos y comodidades— por el sueño de una Nicaragua justa, con escuelas, hospitales y sin la represión de la Guardia Somocista ni el yugo del imperialismo yanqui”.

Hoy rendimos honor y gloria al Héroe de la causa del amor, la justicia y la libertad, Faustino Ruiz “El Cuje”, reafirmando nuestro compromiso de seguir su ejemplo inclaudicable y defender el pensamiento del General Sandino y del Comandante Carlos Fonseca.

Porque su legado vive, y ante su memoria juramos:
¡Por esos muertos, nuestros muertos, juramos defender la victoria!

¡Honor y Gloria a Faustino Ruiz “El Cuje”!